Los concursos públicos constituyen una oportunidad única para las empresas, la administración es el tipo de cliente que toda entidad desearía tener. En nuestro país se publican una media de 300 concursos diarios y las oportunidades se reparten entre los diversos sectores, todos ellos tienen la opción de concursar en estos procedimientos para la adjudicación de bienes o servicios públicos. Sin embargo, una de las mayores dificultades que encuentran las entidades que quieren participar en los mismos es la elaboración de una propuesta con la que concursar.
Las pequeñas y medianas empresas son las que encuentran mayores dificultades para presentar de forma adecuada sus ofertas. Desde la entrada en vigor de la nueva Ley de Contratos del Sector Público, cuya última reforma se produjo en el año 2011, existe cierto desconocimiento o desinformación sobre las cuestiones básicas de una licitación pública. Por ello, pueden surgir dificultades e inseguridad por parte de las empresas que incurren en el procedimiento de licitación. Entre los errores más frecuentes, a la hora de presentar una oferta, surgen cuestiones de relativa gravedad, que pueden desencadenar la exclusión de esas empresas en la licitación. Podemos destacar los siguientes:
- Presentar el proyecto que constituye la oferta fuera del plazo estipulado, lo que supone la exclusión automática del proceso.
- La inclusión en el sobre A, destinado a la documentación general de la oferta económica, de documentación que debe incluirse en otros sobres, también supone la exclusión de la oferta.
- La inclusión en el sobre B, destinado a la documentación relacionada con los criterios de adjudicación, de documentos que deben estar recogidos en el sobre C.
Si bien es cierto que también pueden darse errores que podrán solucionarse, sin suponer la exclusión de la empresa del procedimiento de licitación, entre los que destacan:
- Ausencia de algún documento que debería encontrarse en el sobre A. En este sentido, es conveniente tener en cuenta que sería suficiente con incluir la Inscripción en el Registro Oficial de Licitadores y Empresas Clasificadas del Estado, ya que este documento acredita las condiciones de aptitud del empresario, su capacidad para obrar, su habilitación profesional o empresarial, si cuenta con solvencia económica o financiera y, finalmente, si concurre o no en las prohibiciones de contratación.
- También es frecuente incluir en el sobre C documentación que debería encontrarse en el sobre B. Documentos relacionados con los criterios de adjudicación que serán valorados automáticamente. En estos casos, los documentos que no deban estar en el sobre C no serán objeto valoración.
Es evidente que algunas empresas encuentran dificultades para elaborar una propuesta que les permita incurrir en un concurso público. Será necesario familiarizarse con el perfil del contratante para determinar la línea en la que debería ir la propuesta u oferta. En cualquier caso, estas licitaciones suponen una oportunidad, por lo que es conveniente participar en las mismas. En la actualidad existen servicios profesionales que te informan, asesoran y ayudan a participar en cualquier procedimiento de licitación. En Gestboes, por ejemplo, ofrecen servicios integrales de información en la contratación pública.